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Asegura el candidato de la Alianza por
el Cambio al gobierno local que la actual gestión impide que tenga contacto con la gente.
Santiago Creel Miranda denunció ayer
que el gobierno del Distrito Federal pretende sabotear su campaña, pues durante su
gira proselitista en la Magdalena Contreras, autoridades delegacionales impidieron que
realizara un mitin en el pueblo de San Bernabé.
No es la primera vez, comentó,
pues ya había sucedido en otras demarcaciones, sin embargo se tomó como algo pasajero,
no obstante que en los últimos días ha sido recurrente que “quieran sabotear que
los candidatos de la Alianza podamos estar en contacto con todos los habitantes del
Distrito Federal”.
Detalló que las autoridades de Magdalena Contreras no les otorgaron los permisos, además de que les cambiaron una y otra vez el lugar para realizar el evento.
Eso sólo revela que no hay equidad en
el proceso electoral, consideró, pues mientras la jefa de gobierno, Rosario Robles
Berlanga hace campaña en radio y televisión gastando casi 300
millones de pesos, su administración hostiga a los integrantes de la campaña
de Alianza por el Cambio.
“Creo que sería muy importante
que la jefa de gobierno tomara cartas en el asunto y les dijera a todos sus delegados y
delegadas que la contienda en el Distrito Federal debe ser libre y democrática”.
INEPTITUD DEL GDF
Por otro lado, consideró que la
actual administración capitalina ha perdido el control de la ciudad de México,
pues ha tenido casi tres años para consultar a la ciudadanía para reglamentar o no las
marchas y plantones y así acabar con las pérdidas económicas y caos vial que éstos
provocan.
Dijo que Robles Berlanga no debe “lavarse las manos” en el caso de las marchas que afectan a todos los capitalinos, pues si bien la mayoría son de competencia federal, su responsabilidad es resguardar las vialidades y poner orden.
Ni Cuauhtémoc Cárdenas ni Rosario
Robles, han querido resolver esta problemática, pues sólo piensan en los costos
políticos y los beneficios electorales.
Otro factor que no ha contribuido al
orden de la ciudad de México, agregó, es el pleito que mantienen Robles Berlanga y el
presidente Ernesto Zedillo, el cual sólo ha ido en perjuicio de los habitantes.