Los abusos no
fueron suficientes para alterar los resultados, señaló el organismo internacional Global
Exchange
El organismo internacional Global Exchange afirmó que en los
comicios del pasado domingo sí hubo fraude electoral, pero no el suficiente para afectar
los resultados. Los más de 60 observadores detectaron, durante los 10 días de
estancia en el país, incidentes de compra, coacción e intimidación para votar en favor
del PRI, sobre todo en las zonas de sureste mexicano.
Y las cifras reflejan que pudo ser cierto: Francisco Labastida obtuvo, en zonas rurales, 50.32 por ciento de los votos, mientras Vicente Fox 28.7 por ciento .
Global Exchange y Alianza Cívica
pidieron que el próximo presidente de México, Vicente Fox, cumpla su compromiso y ponga
en primera fila el respeto a los derechos humanos.
Global Exchange, una Organización
no Gubernamental con sede en San Francisco California, Estados Unidos, concluyó en su
informe de observación electoral que los abusos para influir el voto en
favor del PRI constituyen una violación a la libertad de expresión política para
los ciudadanos.
Pero también hicieron observaciones relevantes, respecto de lo visto en Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Hidalgo, estado de México y Yucatán. Por ejemplo, que tal y como lo muestra la gran derrota del hasta ahora partido del gobierno en las pasadas elecciones del 2 de julio, la mayoría de los mexicanos no tiene dudas de que pueden ejercer su derecho a expresar toda ideología política sin miedo o persecución.
Pese a ello, agregan, hay aún
un gran número de mexicanos para quienes la intimidación que ejercen sobre ellos
oficiales gubernamentales y caciques es parte de su vida cotidiana, incluso para aquellos
que disfrutan de privilegios sociales y económicos, como funcionarios públicos,
profesores, trabajadores de salud e ingenieros.
También agregan que el
siguiente paso hacia la democracia plural e inclusiva deberá ser la creación de un
sistema político que alcance a esas capas más marginadas de la sociedad mexicana.