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Se convierte en diputado
independiente “porque no creo en la venta de la democracia y la compra de
candidaturas”, dice. Militó 20 años en el tricolor
El dos veces diputado federal y senador de la República por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Amador Rodríguez Lozano, anunció ayer su renuncia al partido tricolor y, por ende, a su participación como precandidato a gobernador en la próxima contienda interna del Institucional que se verificará el 8 de abril.
Por su parte, el delegado general
del CEN del PRI en la entidad, Jaime Vázquez Castillo, comentó que esa renuncia “es
la culminación de toda una estrategia” que venía desarrollando el diputado, con el
único propósito de salirse del partido.
Después de un fuerte enfrentamiento
con su dirigente nacional, Dulce María Sauri Riancho, el considerado hasta ahora como el
“amarrado o el oficial” para la candidatura a gobernador por el PRI, sorprendió
cuando junto con su familia, se presentó en rueda de prensa para informar que se retira decepcionado del tricolor, en el que militó durante más de 20
años y a través del cual obtuvo importantes posiciones de elección popular,
administrativas y de partido.
Rodríguez Lozano dijo asimismo que
ya envió una carta al presidente del Congreso, el panista Ricardo García Cervantes,
informando de su decisión y solicitando que desde este momento se le considere como un
diputado independiente, no obstante que llegó a la Cámara federal como abanderado del
tricolor.
Amador Rodríguez Lozano funge
actualmente como integrante de la Comisión de Reglamento y Prácticas Parlamentarias del
Congreso y preside la Comisión de Vigilancia de Contaduría Mayor de Hacienda en la misma
Cámara federal de diputados.
“Renuncio al PRI porque no creo en un partido que no atiende los problemas sociales. Renuncio al PRI porque no creo en la venta de la democracia y la compra de las candidaturas.”
Sobre su aceptación inicial a pagar la cantidad que se les fijó para participar dentro del proceso interno, Amador Rodríguez Lozano dijo que lo hizo “porque me di cuenta de la trampa”. Refirió que se les habló inicialmente de una cuota de 400 mil pesos por aspirante a la gubernatura, para obligarlos a aceptar la elaboración de encuestas “para determinar la idoneidad como candidato, como si se tratara de un jabón, un refresco o un artículo comercial”.
Rodríguez Lozano ha tenido entre
otros encargos el ser integrante del Consejo Político Estatal de su partido y director
consultivo de la Dirección General de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de
Gobernación.