ATRIBUYEN A CORRUPCIÓN Y NARCO DERROTA DEL PRI

 

Se demostró que ambos tenían gran influencia dentro del sistema político mexicano, opina ex asesor de la ONU en narcotráfico

 

En México, la droga y el narcotráfico han jugado un papel importante al demostrar, con el paso de los años, que la corrupción estaba generalizada en todos los sectores y que tenían una gran influencia en el sistema político, por ello se puede decir que la droga tuvo una participación trascendental en la pérdida de poder del Partido Revolucionario Institucional en las pasadas elecciones, afirmó Francisco Thuomi, analista de la Universidad de Miami y ex asesor del programa de la Organización de Naciones Unidas para la Fiscalización Antidrogas.

 

El especialista en temas del narcotráfico explicó que México sigue siendo un país atractivo para los diferentes cárteles internacionales, sobre todo, de los colombianos.

 

Una de las razones, dijo Thuomi, es porque buscan a narcotraficantes mexicanos, a los que les pagan en especie, para que sean ellos los que se enfrenten con las autoridades de Estados Unidos al transportar la droga a este último país.

 

“Los Estados Unidos empezaron a atacar tanto a los colombianos, que estos grupos de exportadores (de cocaína), empezaron a vender en México a precios más bajos y dejar que los mexicanos realizaran el envío a Estados Unidos y que se creara un lío entre ambos países”, dijo.

 

El problema de la corrupción en el sistema político mexicano, agregó, ha sido otro de los factores que han ayudado a incrementar el problema del narcotráfico en nuestro país. Tanto, que en su momento la droga ayudó a la derrota del Revolucionario Institucional en las pasadas elecciones de 2000.

 

“La droga ha jugado un papel en la pérdida del poder del PRI, porque básicamente mostró que la corrupción ha sido generalizada. Estados Unidos no quería tener ninguna relación con la policía mexicana, con todas esas instituciones.

 

“A pesar de que en México se negaba continuamente la importancia de la droga, en Estados Unidos se tenía la convicción de que ésta tenía una gran influencia sobre el sistema político”, indicó.



NEGOCIOS MÁS FÁCILES


Francisco Thuomi, quien también es investigador de la Universidad Internacional de Florida, especializado en asuntos de Latinoamérica y el Caribe, y quien fuera el responsable de elaborar el último informe sobre tráfico de drogas en el mundo para la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aseguró que ahora es más fácil hacer negocios con los cárteles mexicanos.

 

“Antes tenían que arreglarse con los capos de la droga en México y con ciertas estructuras del gobierno para facilitar sus operaciones desde Sudamérica hacia el norte del continente”, afirmó.

 

Interrogado sobre la relación entre los grupos de narcotraficantes colombianos y mexicanos, explicó que los primeros operan con estructuras muy reducidas, “de apenas 10 o 20 personas en total, con uno o dos intermediarios y sobre todo, con un esquema de distribución garantizado. Es decir, con un margen de pérdida escaso o al menos calculado.

 

“En tanto, los cárteles mexicanos siguen funcionando como estructuras divididas en grandes núcleos que se reparten zonas y regiones en el país, y aún en el extranjero, con niveles de mando en los que prevalecen dos o tres jefes máximos y una cadena de socios o subjefes encargados de mantener el control sobre mercados y rutas específicas.

 

“Estos capos de la droga son, en apariencia, más visibles que los cientos de minicárteles colombianos, pero al mismo tiempo menos fáciles de atacar debido, entre otros factores, a su capacidad para coptar autoridades de todo tipo”, dijo.

 

En este sentido, agregó que para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la Agencia de Lucha Antinarcóticos (DEA) de Estados Unidos, en Colombia existen entre 350 y 400 pequeños cárteles que operan con amplitud en el país sudamericano para surtir los mercados de consumo regionales y de Estados Unidos.



NUEVAS MAFIAS

 


Francisco Thuomi aseguró que la mafia en Estados Unidos ha cambiado, a tal grado, que actualmente los principales capos ya no son irlandeses o italianos.

 

La nueva cara de la mafia la componen grupos de inmigrantes de diversos países, “esto hace que en el este de Estados Unidos el narcotráfico esté siendo desarrollado por diversos grupos étnicos, como mexicanos, haitianos y colombianos”, dijo. Anteriormente, dijo, las mafias en ese país siempre han estado relacionadas con grupos criminales. Actualmente están vinculadas con los inmigrantes, “así es como funciona el crimen organizado, gente que se siente marginada, como los inmigrantes son los más vulnerables, por eso las mafias tradicionales como las italianas o las irlandesas se han debilitado” y agregó, “es muy posible que dentro de algunos años las organizaciones criminales van a ser multinacionales en su composición étnica”.

 

Al resaltar por otro lado, la imagen positiva que tiene actualmente nuestro país en su lucha contra el tráfico de estupefacientes, el especialista dijo que es una verdadera utopía pensar que algún día se terminará el problema de la drogadicción y el narcotráfico.