DENUNCIAN A ZEDILLO ANTE LA PROCURADURÍA

 

Acusan también al ex Secretario de Comunicaciones y Transportes Carlos Ruiz Sacristán

 

Integrantes de la Alianza Democrática Nacional, denunciaron ayer ante la Procuraduría General de la República al ex Presidente Ernesto Zedillo como probable responsable de los delitos de traición a la patria y tráfico de influencias.

 

Los demandantes acusan también en su denuncia al ex Secretario de Comunicaciones y Transportes Carlos Ruiz Sacristán, pues desde su punto de vista, el ex primer Mandatario y el funcionario habrían delinquido en complicidad.

 

Según la denuncia de hechos presentada ante la PGR por Miguel Aroche Parra, José Luis González Meza y José Oviedo Puente León, Zedillo y Sacristán privatizaron en forma ilícita la empresa Ferrocarriles Nacionales de México.

Según la demanda, el 6 de agosto de 1996 se constituyó la empresa Transportación Ferroviaria Mexicana, en donde aparece como principal accionista José Serrano Segovia y familiares, así como una serie de ciudadanos estadounidenses "de muy dudosa reputación", accionistas de la Unión Pacífico Corporación, de los Estados Unidos.


La parte demandante argumenta que posteriormente le fue otorgada a la empresa la concesión de la compañía Ferrocarriles del Sureste, entre los que destacan como accionista Emilio Sacristán Roy, quien, aseguran los denunciantes, es sobrino del ex Secretario de Comunicaciones y Transportes.


"En virtud de la acción realizada entre el señor José Serrano Segovia y el ex Secretario de Comunicaciones y Transportes al incluir a su sobrino Emilio Sacristán Roy, cometió el delito de tráfico de influencias", aseguró José Luis González Meza.

 

Dentro de la querella, los denunciantes citan que la compañía Transportación Marítima Mexicana, donde tiene acciones José Serrano, es investigada por lavado de dinero y contrabando internacional de drogas, según consta en la PGR.

 

Ante esta situación, la parte denunciante señala la necesidad de que al ex Presidente Ernesto Zedillo se le investigue también por probables delitos contra la salud.


Pese a que no allegaron a la representación social pruebas o testimonios de sus incriminaciones al ex Primer Mandatario, los quejosos consideraron que Serrano habría sido encubierto por Zedillo.