Trabajó para los
servicios de inteligencia de 1971 a 1978, cuando estudiaba postgrado en EU, acusa un
libro
WASHINGTON. El diputado federal del PRD Gilberto López y Rivas habría sido un agente de los servicios de inteligencia ex soviéticos, al menos entre 1971 y 1978, cuando hacía estudios de postgrado o daba clases sobre chicanos en universidades estadounidenses, de acuerdo con un libro recién publicado aquí.
El libro Cassidys
Run (La carrera de Cassidy) narra los detalles de un presunto caso de espionaje en
el que un doble agente manejado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI)
proporcioné a sus contactos documentos que incluyeron la fórmula de un gas
venenoso, pero tan inestable que los estadounidenses habían decidido no fabricar.
El caso de espionaje como tal duró 23 años, durante los cuales el sargento mayor Joseph Cassidy, del Ejército estadounidense, pasó unas 4 mil 500 páginas de textos presuntamente secretos a la GRU (una de las agencias de espionaje soviéticas).
El texto del ex periodista David
Wise señala que López y Rivas y su familia salieron prácticamente huyendo de Estados
Unidos, el 5 de junio de 1978, luego de una conversación con agentes del FBI en la
Universidad de Minnesota, donde daba clases.
López y Rivas, y su esposa nunca
fueron acusados formalmente, aparentemente debido a dificultades con acciones de
vigilancia desarrolladas por el FBI y que a causa de problemas burocráticos, la
incriminación no había sido formalmente autorizada.
El libro incluye fotografías
presuntamente tomadas durante la vigilancia de López y su esposa, cuando iban a recoger
mensajes o documentos depositados en un buzón clandestino en San Petersburgo,
Florida, en abril de 1972 por el doble agente, identificado como Jack Cassidy, un sargento
mayor del Ejército.
De acuerdo con el libro, López recogía varias veces los documentos depositados por Cassidy al amparo del carrito en que llevaba a su hijo Nayar, entonces de unos dos años.