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Sauri calificó de ilegal la elección de su correligionario López Hernández como gobernador interino; en cambio, hay 10 ex presidentes de ese instituto que lo apoyan.
La pugna por la titularidad del gobierno interino mantenía anoche a esta entidad al borde de la ingobernabilidad. La división entre el priísmo local se acentuó a tal grado que un grupo de 10 ex presidentes del partido se pronunció por restituir la legalidad y reconocer a Adán Augusto López Hernández como gobernador, mientras que los sectores afines a Roberto Madrazo insisten en mantener a Enrique Priego Oropeza en la Quinta Grijalva, donde la burocracia fue llevada a “saludar” al Ejecutivo estatal.
La falta de acuerdos rebasó, incluso, a la dirigente nacional del PRI, Dulce María Sauri Riancho, quien fue desmentida públicamente, después de asegurar la madrugada de este miércoles que había sido ilegal el nombramiento de Adán Augusto López Hernández, y que éste le había refrendado su militancia priísta y que le había dicho que no aceptaría rendir protesta al cargo y que apoyaría a Enrique Priego.
En las primeras horas de la mañana, López Hernández rechazó las declaraciones de Sauri y manifestó, en entrevista con una televisora: “Con todo respeto le digo a la presidenta de mi partido que ella no es autoridad para declarar legal o ilegal un acto de un poder soberano del estado de Tabasco. Ella puede emitir una opinión, pero no puede declarar legal o ilegal. No es a ella a quien corresponde tal aseveración.”
López Hernández también exigió a Priego que renunciara.
La crisis política mostró otro de sus rostros en el Congreso local, pues desde el inicio del año y desde que se instaló la LVII Legislatura, ésta cuenta también con dos mesas directivas, sin que ninguna tenga el control pleno del Poder Legislativo.
Otra manifestación de la ausencia de autoridad se hizo patente ayer tras la suspensión de la sesión ordinaria del Congreso local y de todos sus trabajos parlamentarios.
La falta de trabajo legislativo ha impedido, por ejemplo, que el gobernador interino que nombraron los priístas de la LVI Legislatura, Enrique Priego Oropeza, envíe la terna que por ley deben analizar los diputados locales para elegir al procurador general de Justicia del estado.
De esta forma, Tabasco tenía hasta ayer en la noche dos gobernadores interinos y dos mesas directivas en el Congreso, y en ambos casos, ninguna autoridad contaba con el pleno reconocimiento de todas las fuerzas políticas y ninguna podía ejercer plenamente sus funciones.
En apoyo al interinato de López Hernández se manifestaron durante el día, en diferentes eventos, los ex precandidatos del PRI a la gubernatura, Arturo Núñez Jiménez y el diputado federal Humberto Mayans Canabal, así como el ex coordinador nacional de la campaña para la candidatura presidencial de Roberto Madrazo, Pedro Jiménez León.
Y en abono a lo que se perfila como una fractura al interior del tricolor tabasqueño, un grupo de 10 ex presidentes del PRI local hicieron públicas dos cartas, una dirigida a Sauri Riancho y la otra, a los priístas y a la sociedad civil titulada “Restituir la legalidad para preservar la paz y el bienestar de los tabasqueños”.
En la primera, le dicen a la dirigente que “nunca un acto de fuerza y de torcimiento de la ley y la civilidad republicana podrá solucionar ningún conflicto”, y la llaman a buscar los “consensos necesarios”, para que el estado deje ser un factor que distorsione la marcha de la República.
En la segunda plantean que la única salida posible a la crisis de gobernabilidad es la inmediata restitución de la legalidad, es decir, el reconocimiento de Adán Augusto López Hernández como gobernador interino.
El texto lo suscriben Humberto Mayans, Pedro Jiménez León, Freddy Chable, Félix Heladio Sarracino, Manuel Llergo, Carlos Elías Dagdug, Víctor Manuel López Cruz, Fausto Méndez, Santana Magaña Izquierdo y Ramón Magaña Romero.
La senadora Georgina Trujillo Zentella, identificada políticamente con el ex gobernador Madrazo, y quien ha sido mencionada como una tercera opción para ocupar el interinato, hizo una defensa férrea del interinato de Enrique Priego Oropeza, designado por la LVI Legislatura en la madrugada del 31 de diciembre, y a quien Sauri reiteró su apoyo.
El Congreso, otra crisis
En el Congreso, el bloque opositor –12 perredistas, dos panistas y un petista– sostiene que el Congreso está constituido en Colegio Electoral desde el martes, con su propia directiva.
En cambio, la fracción mayoritaria de 16 priístas asume que el Congreso no está constituido en Colegio Electoral, y por lo tanto procedieron a nombrar la mesa directiva de la Gran Comisión desde la madrugada del martes.
Para los priístas no hay nada más qué hablar sobre la designación y toma de protesta de interinos, pues Enrique Priego ya es el mandatario, y por lo tanto el Congreso debe continuar sus trabajos ordinarios.
Pero ni las fracciones del PRI ni las de oposición se presentaron ayer al Congreso para sesionar.
Y aun cuando la disputa por la gubernatura no concluye, los protagonistas intentan ganar tiempo y apoyos.
Enrique Priego, por ejemplo, ya despacha como mandatario desde el mismo lunes en la Quinta Grijalva, residencial oficial de los gobernadores, y ha alternado el nombramiento de su gabinete con participaciones discretas en actos públicos.
Ayer empleó gran parte del día en la “tradicional salutación”, evento que consistió en el desplazamiento masivo de la burocracia estatal y municipales a la capital del estado para que miles y miles de personas los saludaran personalmente.
A su vez, Adán Augusto López dedicó el día a cabildear entre sus compañeros de partido, el PRI, para conseguir más apoyos que lo apuntalen en la gubernatura interina.
En declaraciones a una radiodifusora estatal, dejó en claro a los dirigentes y diputados del PRD que no asumirá la gubernatura interina mientras no tenga el suficiente apoyo que lo mantenga firme en el cargo para cumplir con el propósito de expedir la convocatoria a nuevas elecciones en un plazo no mayor a cinco días, y que los comicios se realicen dentro de los siguientes seis meses
Revelaciones
López Hernández confesó que Roberto Madrazo Pintado rompió el acuerdo entre PRI, PRD, PAN y la Secretaría de Gobernación, para que él fuera electo gobernador interino por consenso, incluso con el apoyo de su amigo Manuel Andrade y la aceptación del propio ex gobernador.
Recordó que la noche del 30 de diciembre, alrededor de las 21:30 horas se aceptó ese acuerdo político, con la garantía a los partidos opositores de realizar elecciones transparentes y la reforma electoral, pero sólo quedaba pendiente consensuar la fecha de la elección.
Recordó que a las 23:00 horas de ese mismo día, Roberto Madrazo le ofreció que estaba listo el Congreso del estado reunido en pleno y listo para que tomara posesión, “ya eres –le dijo– gobernador por consenso”. Sin embargo se carecía del acuerdo entre las fuerzas políticas opositoras la fecha de la elección Yo le digo –narró López Hernández– que así no iba a ningún lado. Le expreso que yo tengo razones jurídicas para no creer en ese procedimiento y que también tengo razones de índole moral.
Recordó que ante esa respuesta que dio, se tensó el ambiente entre Madrazo y él.
“Destapan” a Andrade
En conferencia conjunta con Manuel Andrade Díaz, López Hernández reafirmó anoche su militancia, lealtad y apego ideológico al PRI, y dijo que como secretario general de ese partido participará en las negociaciones con otras fuerzas políticas para solucionar la crisis que actualmente se vive en Tabasco.
En una declaración pública en la sede del PRI, López Hernández llamó a todos los partidos a sentarse para negociar los plazos en que deberá convocarse a nuevas elecciones de gobernador, y a dirimir en las urnas y por los medios legales establecidos cualquier diferencia política.
Andrade Díaz, cuyo triunfo como gobernador electo fue revocado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, fue “destapado” anoche como próximo presidente estatal del PRI, luego de que el actual dirigente Floricel Medina Pereznieto, presentó su renuncia argumentando tener ahora la responsabilidad de ser coordinador de la bancada priísta en el Congreso local. El consejo político estatal del PRI sesionará esta mañana para confirmar la asunción de Andrade Díaz a la dirigencia del partido, con base en una convocatoria “hecha a la medida”.